Mayores solidarios

El diario ABC de Córdoba públicó el pasado domingo un trabajo sobre Los Mayores Solidarios y entre ellos hizo esta semblanza de nuestro presidente Luis Moreno y de su esposa Francisca Moreno. En estos días en que convalece de una operación quirúrgica, queremos desde este Oficina Virtual dedicarle este trabajo con nuestro deseo de su pronta recuperación:

LUIS MORENO SEGURA, 85 AÑOS

PRESIDENTE BANCO DE ALIMENTOS MEDINA AZAHARA

«Estaré aquí hasta que la fuerza física me falte»

 
Los voluntarios del Banco de Alimentos de Córdoba Medina Azahara tienen en su presidente un modelo de referencia. La admiración que sienten por Luis Moreno es fruto de su entrega y pasión. Rozando los 85 años, este hombre pone cada día el listón más alto. «Hoy estaba en el médico, pero no tardará en llegar», responden en la asociación cuando se pregunta por él. Es raro el día en que no esté allí arropando con su presencia la labor de los voluntarios que recaban alimentos para los más necesitados.
Luis trabaja como el que más. «La fuerza física ya no es la misma, pero mientras me quede, seguiré aquí al frente», reconoce. Quien le conoce no duda de la convicción de la frase. Un pilar fundamental en su vida y en su labor solidaria es su esposa, Francisca Moreno, por encima también de los 80 años. «Trabaja conmigo, es mi sombra, juntos nos apoyamos e intentamos cada día mejorar», sostiene el presidente del banco solidario.
Un ejemplo de ello es que ambos están perfectamente al día en conceptos de informática para controlar la entrada y salida de productos. «Hay que aprovechar al máximo las nuevas tecnologías y aprovechar también las cualidades de nuestros voluntarios para que redunde en la asociación», explica Moreno. Para este solidario, el Banco de Alimentos es también su primera experiencia como voluntario. «Cuando me jubilé quise dedicarme más a los demás, puesto que siempre me he considerado una persona solidaria», reconoce. Fue así como formó parte del grupo de socios fundadores de esta oenegé, que se constituyó formalmente en 2004. Desde entonces, Luis tiene cada año un motivo más de alegría al ver cómo el pueblo cordobés fulmina records temporada tras temporada en la entrega de alimentos.
El primer año se recogieron 17,5 toneladas. El pasado 2011, «lo cerramos con 3.594 toneladas», indica Moreno lleno de orgullo, quien se deshace en elogios en los organismos colaboradores, los voluntarios y el pueblo de Córdoba, ya que «esto, aunque suponga un esfuerzo, es una gran obra social».