La Cruz de Sant Jordi a la Fundación Banco de Alimentos de Barcelona
El Gobierno de la Generalitat ha concedido la Cruz de Sant Jordi a la Fundación Banco de Alimentos de Barcelona.
La Cruz de San Jorge es uno de los máximos galardones que puede recibir una persona o entidad pues desde 1981, año de su instauración, esta distinción reconoce a personas y entidades que, por sus méritos, han destacado en un ámbito social determinado.
El Banco de Alimentos de B
arcelona es el primer Banco de Alimentos que se instaura en España y fue fundado por Jordi Pêix Massip (Barcelona, 1944) activista agrario catalán.ingeniero técnico agrícola por la Escuela Superior de Agricultura de Barcelona, que entre otros cargos ha desempeñado el de participante en la confección del nuevo Departamento de Agricultura , Ganadería y Pesca de la Generalidad de Cataluña presidida por Josep Tarradellas i Joan; el de Director General de Producción e Industrias Agroalimentarias en el periodo del ingreso de España en la Comunidad Económica Europea y la integración del sector agrario catalán en el marco de la Política Agrícola Comunitaria;y el de director general en la Dirección General del Medio Natural.En 2008 fue galardonado con la Creu de Sant Jordi. La creación del Banco de Alimentos de Barcelona fue, hace ahora 25 años, como consecuencia de un viaje que realizó a París, a una feria agroalimentaria y encontrar allí funcionando el Banco de Alimentos de Paris. Trajo la idea a España y en la actualidad el Banco de Alime
ntos de Barcelona es llevado por 150 voluntarios y repartió el año pasado 12 millones de kilos de alimentos que llegaron aun colectivo de 115.000 personas necesitadas.El Banco de Alimentos de Córdoba se congratula de esta noticia que viene a reconocer de manera oficial la dedicación de tantos voluntarios a los necesitados a través de los más de cincuenta Bancos de Alimentos que operan en España
A ver si cunde el ejemplo y más Bancos de Alimentos del resto de España reciben reconocimientos, que de momento están recibiendo otras entidades que quizá lo merezcan menos, quizá por desconocimiento de nuestra labor.
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